QUAB 188

El producto puede almacenarse durante períodos prolongados (1-2 años) sin prácticamente ninguna pérdida de actividad. Es estable a temperaturas de hasta 50 °C. A temperaturas más altas, el pH puede reducirse ligeramente con el tiempo. Sin embargo, esto no afecta a las propiedades de aplicación del producto.

Dependiendo del contenido de sólidos totales, puede producirse la cristalización a temperaturas de almacenamiento inferiores a 0 °C. Los sólidos totales se definen como el total de todos los compuestos sólidos disueltos en la solución de Quab.

Puntos de cristalización:

Quab 188 (69 % en peso): por debajo de -4 °C (24,8 °F)
Quab 188 (65 % en peso): por debajo de -34 °C (-29,2 °F)

Materiales adecuados:
Los tipos de acero inoxidable 316L y 316TI (DIN 1.4571) son básicamente adecuados para los contenedores de transporte, pero se recomiendan para el almacenamiento sólo con restricciones. Es obligatorio el decapado de los contenedores y las tuberías prestando atención a las soldaduras. Estos materiales están sujetos a picaduras tras periodos prolongados de contacto y a temperaturas elevadas. Sin embargo, como los contenedores de transporte no están sujetos a un contacto prolongado, estos materiales pueden utilizarse para Quab 188. Los contenedores de plástico pueden utilizarse en todos los casos.

Recomendamos un recubrimiento para los tanques de almacenamiento de los tipos de acero inoxidable 316L y 316TI (DIN 1.4571). Como alternativa, se pueden utilizar tanques de plástico reforzado con fibra u otros recipientes de almacenamiento revestidos. Los materiales adecuados para Quab 188 son el poliéster, el polietileno, el PVC, las resinas fenólicas curadas al calor o las resinas epoxi, el neopreno, el Buna S y el Buna N. También se pueden utilizar contenedores y tanques esmaltados. Cualquier daño en el revestimiento debe ser reparado.

Materiales inadecuados:
Para el Quab 188, los recipientes de chapa de caldera H II, aluminio (99,5) y los tipos de acero inoxidable, 304L y 321 (DIN 1.4541) no son adecuados. A 50 °C, la velocidad de corrosión de la chapa de caldera H II es de 0,2 mm por año, la del aluminio (99,5) de 0,1 mm por año. Las muestras de ensayo de los tipos de acero inoxidable 304L y 321 (DIN1.4541) presentan picaduras de hasta 0,05 g/m2 al día.